Diversidad e inclusión, ¿una moda o una necesidad?

Todas las grandes organizaciones en el Perú están potenciando su estrategia de diverdidad e inclusión, no solo porque es lo justo, sino porque los beneficios de su implementación impactan en varias areas de la empresa: desde el clima laboral, hasta el sentido de pertenencia a la organización.

¿De qué hablamos cuando nos referimos a Diversidad e Inclusión?

Cada persona es está compuesta por sus identidades (padre, madre, pareja, colaboradora, etc.) y todas son parte de nuestra individualidad y aquello que nos hace diferentes de otras personas. La diversidad es reconocer que cada persona es distinta a las demás, y que esas identidades que nos diferencian, son la suma de sus identidades.

Entonces, ¿qué es la inclusión?

La inclusión es escuchar y tomar en cuenta las opiniones y formas ser y pensar al interior de los procesos de la organización. Esto quiere decir que podemos ser parte de una organización diversa, pero no necesariamente inclusiva.

Si lo describimos de forma simple, podríamos decir que la Diversidad es como si te invitan a una fiesta, la Inclusión es que te saquen a bailar y formes parte de la diversión.

La gestión adecuada de la diversidad e inclusión tienen un impacto que remoldea la cultura de la organización, aumenta en 63% la retención del talento diverso, 59% muestra mejores resultados que otras organizaciones de la industria, cuyo foco no fue atraer al talento diverso.

Hay un incremento del 154% en innovación y performan 8 veces más en tareas creativas.

Cada vez más las organizaciones están comprendiendo la importancia de contar con equipos diversos e inclusivos y apuestan por generarlos, lamentablemente la lentitud del organo gubernamental, deja gran parte del peso a la empresas privadas, sún así las brechas son muy grandes:

En equidad de género:

• En el Perú, por cada S/1 sol que gana un hombre, las mujeres que cumplen con el mismo rol, ganan S/ 0.70. 30% menos en promedio.
• A Latinoamérica le tomaría 86 años nivelar la brecha salarial actual.
• El número de mujeres que termina la secundaria es mucho menor que el de los hombres, esta conducta está asociada a la visión de la mujer solo como ama de casa, exponiéndola a que sus parejas ejerzan algún tipo control, maltrato o violencia mediante el acceso al dinero familiar. Así mismo estas mujeres buscan labores operativas, por lo que sus ingreso distan de los de sus parejas.

Fuente: Adeco Group 2019, World Economic Forum – Global Gender Report 2021.

Diversidad sexual

• 8% de las personas se identifican como no heterosexuales.
• 71% de las personas indica que la población LGTBIQ+ es discriminada, sin embargo al preguntar a las personas si tuviera una empresa, contratarían a una persona homosexual, solo el 40% lo haría, esta cifra se reduce a 31% para el caso de las personas trans.
• 41% de la población LGTBIQ+ no sale del closet en sus organizaciones, por medio a perder su empleo.
• Casi el 35% de las personas encuestadas respondieron que es peligroso dejar a niñas y niños al cuidado de personas LGTBIQ+.
• El 45% cree que las personas trans viven confundidas, y alrededor del 43% que las personas LGTBIQ+, son así producto de algún trauma o vivencia de la niñez.

Personas con discapacidad

• ¿Sabías que 8 de cada 10 personas con discapacidad está desempleada? Este número es 3 veces más alto que el promedio país.

Necesitamos reparar el sistema, hacer que las personas sean felices con quienes son, sin miedo a represalias, burlas, bulling y entrentar barreras definidas por los sesgos de las demás personas, basar nuestros creterios de contratación en el talento de las personas y lo que pueden aportar a la organización, genernado acceso a oportunidades laboras y de crecimiento.

El seguir trabajando en pro de los derechos humanos es responsabilidad de todas las personas, no solo de las empresas. Sin embargo, actualmente está en manos de la empresa privada el seguir empujando las iniciativas en relación a los derechos de cada persona nacida en el Perú, dado que el Estado Peruano no está en capacidad de atender a esta población de la manera adecuada y la ausencia del tema en la agenda política del país.

Debemos trabajar en especial en: equidad de género, derechos igualitarios para todas las personas, así como establecer políticas y prácticas que permitan reducir la brecha de portunidades laborales para personas con discapacidad; mediante iniciativas que nos permitan establecer nuevos estándares de justicia, recompensa y bienestar para nuestros equipos.